Centa Asiatica: Tiene el poder de cicatrizar y reparar la piel. Ayuda a recuperar la barrera de protección natural de la piel, aportándole salud y luminosidad.
Pantenol: Repara la piel.
Escualeno: El escualeno es un aceite que nuestro cuerpo produce naturalmente, pero esta producción disminuye drásticamente con la edad, lo que lleva a la sequedad de la piel. La mejor manera de restaurar los niveles de escualeno de tu piel es usar productos que contengan este ingrediente.
Aceite de jojoba: Es un aceite muy ligero y menos graso que otros aceites, por lo que es un buen complemento para hidratar la piel. Además, es una fuente de ácidos grasos que ayudan a calmar y nutrir la piel.
Agua de hoja de centella asiática, triglicérido caprílico/cáprico, butilenglicol, glicerina, glicereth-26, tetraetilhexanoato de pantaeritritilo, olivato de sorbitán, 1,2-hexanodiol, palmitato de cetilo, alcohol cetearílico, pantenol, aceite de semilla de Simmondsia chinensis (jojoba), escualano, sorbitán Palmitato, olivato de cetearilo, lecitina hidrogenada, extracto de centella asiática, caprililglicol, carbómero de sodio, carbómero, aguamarina, goma xantana, etilhexilglicerina, adenosina, madecasósido, fitosteril/octildodecil lauroil glutamato, ceramida NP, asiaticósido, extracto de Houttuynia Cordata, hialuronato de sodio